2 de marzo de 2010

Terremotos 2010

El pasado 12 de enero, recibíamos noticias de que Haiti, este país tan pobre, había sido afectado por un terremoto 7 grados escala Richter. Las consecuencias de éste fueron totalmente devastadoras: el 80% de las construcciones de ese país fueron totalmente destruidas y el resto afectadas; puso fin a un gobierno de extrema debilidad, lo que provocó el caos generalizado y como si esto fuera poco la gran cantidad de perdidas humanas 230000 y mas de 250.000 heridos, un millón de personas sin hogar… estos datos nos dejan un panorama netamente triste.
El mundo se solidarizo con Haiti, GRACIAS A DIOS llego ayuda de muchos países, remedios, ropa, alimentos, personal medico, todo esto para sumar al menos un granito de arena para mejorar esta nefasta situación… pero cuando todos pensábamos en como seguir ayudando a Haiti, la naturaleza volvió a “enfurecer” y a las 3:30am del 27 de febrero, cuando todo Chile dormía, la tierra volvió a temblar, esta vez con más intensidad, 8,8 grados escala Richter.
Estos fuertes sismos que sufrieron los dos países dieron pie a que nuevamente aparezca lo mejor y lo peor de la naturaleza humana... Porque digo esto…? Por que si, es cierto, apareció lo mejor… Tanto dentro como fuera de los países muchos se preguntaron que hacer para ayudar… se preocupaban por averiguar como enviar donaciones, preguntan qué ayuda es la más eficaz y la más necesaria. GRACIAS A DIOS llego apoyo y ayuda de muchos lados. Pero lamentablemente también existe el otro lado… lo peor de la naturaleza humana.

Hoy veía en la tele el caos y la violencia producido por los saqueos... actos netamente de vandalismo, grupos que se juntan para arremeter contra algo o alguien…golpes, violencia, represión… todo en medio de tanto dolor… increíble! ¿Será posible eliminar ese lado negativo de la naturaleza humana?
Creo que todo lo pasado, mas allá de dejarnos un gusto mas que amargo, debe hacernos reflexionar, debemos “dejarnos afectar” para involucrarnos y entender que debemos educar... SI EDUCAR... inculcar valores como la solidaridad, la honradez, la decencia… y sacarlos aún más en los momentos difíciles... esa gente perdió TODO y le están sacando lo poco que les queda…
Creo fielmente que no debemos esperar otra tragedia como las sucedidas para mirarnos y descubrir lo más cuestionable de la conducta humana. Así como nos preocupamos por construir nuestras casas seguras también nos tendríamos que ocupar por construir buenos modelos de educación y de socialización, que tengan sólidos valores morales.
Es bueno que podamos ayudar a contener… a que tanto haitianos como chilenos puedan ser capaces de salir adelante en este mal trago que hoy les toca vivir, apoyándose unos a otros, solidariamente. Es muy utópico lo que pienso????

2 comentarios:

Anónimo dijo...

para nada utópico Karu, y así hay que pensar
así como hubo delincuentes, también hubo héroes, una de ellas Martina MATURANA, 12 AÑOS, EN LA ISLA JUAN FERNÁNDEZ, dio la voz de alarma y contribuyó a salvar muchas vidas, avisándo que venía el tsunami, la destaco justamente hoy en el día internacional de la mujer.

alberto de chile

Aleka dijo...

No es para nada utópico lo que pensás y decís. Como sobreviviente del terremoto en Chile, te puedo decir que no solamente los robos traían el miedo a las calles, sino también esa incertidumbre de no saber cuando iba a parar de moverse la tierra, por eso la gente, a pesar de tener miedo, se reefugiaba en sus casas (los que podían) y esperaban ahí. También dictaron el Estado de Sitio, cosa que agravó la situación.
En pocas palabras fue un sálvese quien pueda, por unos 3 o 4 días. Después se comenzaron a ver esas ayudas, pero los primeros momentos fue un caos.
Otra cosa que quiero decir, ya que puedo comentar, lo que más me indignó en esos días, no fue el terremoto, sino fue la falta de atención del estado argentino para con los argentinos varados en Chile, cuando fuimos al consulado argentino en Santiago, nos dijeron que no nos podían ayudar. Gines García estaba en Buenos Aires y no había ninguna política en ese momento para casos como esos.
En fin, sobreviví, pero no fue nada fácil salir de Santiago, por tierra, ya que Lan también hizo oídos sordos de la situación de cientos de pasajeros.
Solo quería comentar lo que fue desde mi punto de vista, pasar uno de los 5 terremotos más fuertes de la historia de la humanidad. Gracias por el espacio.